Esta sesión de jazz prometía mucho. Varios maestros partiendo por Sebastián Jordán en trompeta, el incomparable Agustín Moya en saxo tenor, seguido por René Sandoval en contrabajo y Carlos Cortés en batería, todos ellos acompañados por un músico que siempre me sorprende, me refiero a Rodrigo Dañobeitía, en guitarra. Low profile, es su marca.
Salvo excepción, los temas que tocaron esta noche le pertenecían a Agustín Moya (como te exiges!!!!) y secundariamente a Sebastián y otros autores.
Una sesión virtuosa, llena de desafíos musicales, que nos hicieron enormemente disfrutable la sesión. Cuando comenzaba la segunda parte, un visitante furtivo Felipe Riveros se apareció y fue abducido por la banda, le pasaron la pauta musical y en menos de nada, los acordes de piano comenzaron a alimentar la tocata. Fantástico, cada acorde de piano hizo un milagro en el disfrute de esta noche.
Este Sexteto casual, es una maravilla, preciosa noche!!!!