Esperaba con ansias el día en que el Teatro Municipal pusera en escena esta ópera que Mozart, basado en el texto “La Folle journée, ou Le Mariage de Figaro”, compuso en seis meses y que dirigiera personalmente en 1787.
Las Bodas de Fígaro, probablemente la más genial ópera de Wolfgang Amadeus Mozart es considerada una de las más importantes óperas de la historia.
La historia transcurre completa en el Palacio del Conde de Almaviva, cerca de Sevilla. Un gran palacio de mármol en donde los sirvientes Fígaro y Susana preparan su boda. Cuando Fígaro se entera que el Conde pretende seducir a su novia urde un ingenioso plan para vengarse. Una comedia llena de enredos, vivezas, seducciones, celos, conspiraciones que culminan cuando los sirvientes finalmente contraen matrimonio y el Conde recibe su merecido con la participación cómplice de la propia Condesa.
Esta divertida ópera contó con un elenco internacional de primera línea, la perfecta ejecución de la música maravillosa de Mozart por parte de la orquesta del Municipal y la sencilla pero notable escenografía que acostumbra el Teatro.
Tras este filete del arte musical, nos fuimos a la Casa Abarzúa, un lugar de fusión nikkei (peruano-japonés) en calle Monjitas, para disfrutar unos tragos y un picoteo delicioso, acompañados de la exquisita música ambiental. Una jornada perfecta!!!