Cada cierto tiempo, barrio Bellavista recoge nuevos sitios de disfrutes y se aparecen cuando salimos en cacería con mi hermano. Esta noche, con ganas de conversar y de conocer un buen sitio tranquilo, nos sorprendimos con un local en Dardignac que nos entusiasmó solamente cuando supimos que tenía una terraza en la zona superior.
Francamente no habríamos ingresado sin saber que tenía terraza. Después de todo, era una de esas noches calurosas y merecía la visión de las estrellas afortunadas que se hacen notar entre la nube de smog.
Instalados en un rincón de una terraza muy linda, con una barra de bar, mesas bajo paraguas y una buena música, se nos presentó un buen carrete. Vimos en la carta que habían piqueos interesantes y además vinos, todo lo cual venía de maravillas para nuestra reunión. Unas croquetas de jamón, unas gambas a la plancha al oliva y perejil además de un tártaro de salmón eran suficiente excusa para pedir una botella de Malbec argentino Finca La Linda (a estas alturas mi fetiche del Malbec).
Larga conversación sobre los últimos sucesos en la vida de mi hermano, momentos complejos de los cuales (presagio) saldrá bien parado, ya que él ha sido impecablemente honesto y buena gente. Me siento orgulloso de tener un hermano así de power.
Rica noche, un buen lugar para conversar y comer rico.