Sorpresivamente en el Teatro Ictus comenzó a presentarse esta obra dirigida y actuada por la buenamoza Katty Kowaleczko y con un reparto muy interesante , Paulo Brunetti como el cura Flynn, pieza clave de la historia además de Josefina Velasco y Aranzazú Yancovic.
Es una historia compleja que transcurre en un rígido colegio religioso dirigido por una obsesiva y terrible directora, la hermana Luisa actuada por esta sorprendente Kowaleczco, una mujer de voz tremenda y de unas convicciones insoportables. El colegio ha admitido al primer alumno negro en su historia y el cura progresista, el padre Flynn, ha tomado especial apego hacia ese niño. Allí se teje una trama de sospechas y alambicados juicios acerca de un eventual acercamiento homosexual en donde la duda aparece una y otra vez. En ocasiones favoreciendo al cura y en otras a la directora, en una mezcla de emociones y prejuicios que busca jugar permanentemente con los propios juicios livianos del espectador.
El rol que juega una inocente novicia, la hermana Jane, solo hace de bálsamo temporal en la aspereza del duelo entre directora y cura, pero no resuelve nada. Es una trama fatal en donde esa tremenda directora hará realidad, usando la mentira si es necesario, sus prejuicios y dudas.
La duda, gran título, ya que es lo que se instala implacable en la mente de los espectadores con la suficiente fuerza para condenar y emitir el juicio final.
Impresionante obra, terriblemente actual, un notable trabajo!!