PezToro : un rico sitio en barrio Lastarria

Justo entre varios lugares conocidos  (Bar La Junta y Cafe Urriola, Casa Lastarria) y que he disfrutado en diversas ocasiones se ha ubicado hace  poco tiempo un nuevo sitio. Se trata del PezToro, un lugar prometedor no solo por su oferta gastronómica sino además por compartir esa terraza deliciosa de Lastarria 70.

La oferta es limitada pero sabrosa e incluye tablas, ensaladas, pizzas (piadinas y calzones), sandwiches e incluso  algunos platos. Cómo tenía poco tiempo para disfrutar el lugar, elegí con cierta rapidez una muestra representativa de su cocina y que, por cierto, me diera suficiente placer.

Partí con unas tapas de croqueta española, unas abundantes tapas de jamón serrano con salsa tártara. la chica atenta se aseguró de llegar en poco tiempo con mi pedido pero olvidó la salsa. Ante mi rápido reclamo, se aseguró de completar el plato en buen tiempo, lo cual me dio una pista acerca de la calidad de servicio.

A continuación, seleccioné una piadina greca, queso de cabra, rúcula y jamón crudo que no pude evitar acompañar con un buen vino, así que salió de la interesante carta un Caliterra reserva merlot delicioso.

Rico lugar, claramente acostumbrados a comensales de fast food, pero que no arrugan ante la demanda de algo mejor. Se anota como un buen sitio con detalles, todos mejorables.

Volveré para un día de cena y espero conocer más de este interesante lugar.

 

 

 

Pata Negra : rica experiencia

Regresando en cleta de mi acostumbrado ascenso al cerro San Cristóbal, un fin de semana hace algo más de un mes detecté la existencia de este lugar de pequeña fachada. Ya era hora que lo visitáramos.

Entramos y lo primero fue reconocer una rica música lounge a un volumen adecuado, la iluminación tenue y un bar muy activo. Apenas nos sentamos, nos ofrecieron un par de cartas, una de comidas y la otra de bebestibles.

Para comer, la carta ofrece una increíble variedad de pinxos (más de 20 bocados de pan baguette con creativas combinaciones sobre éstos). Además tapas, ensaladitas y otras cosas que no recuerdo. La otra carta, presenta una selección estupenda de vinos, cervezas (birras) y tragos por doquier.

Considerando el hambre acumulada, pedimos unas albóndigas rellenas de queso y envueltas en una exquisita salsa con tomates y especias. Una maravilla, que acompañamos rapidamente con un ensamblaje adorable, un Parcela Nº7 de Von Siebenthal.

Tentados con los pinxos, pedimos los más exóticos para probar, así llegaron un Chavalito, un cabrón, un torero, un pimpollo y un pijo. Españolazos y verdaderamente adictivos!!!!

Buen concepto y deliciosa cocina.