La experimentación en jazz es todo un género en si mismo, sin embargo, pocas veces podemos ver en Santiasco un espectáculo de este nivel. Es segunda vez que tengo el placer de ver en vivo a este trío excepcional. Un Teatro Oriente repleto, a mediados de septiembre, como se merece una banda de este tipo. Me llama la atención lo variopinto de la audiencia, muchos jóvenes pero también muchos viejos con sus hijos. Notable!!
Con un sentido atraso, llegan al escenario y parten sorprendiendo, Martin en las percusiones acompaña de manera genial al sonido que Wood imprime a ese bajo milagroso, un sonido increíble. Jazz post moderno en acción, al que pronto se unen los sicodélicos acordes de Medesky en su multitud de teclados y paneles electrónicos con los que juega y deleita a todos.
Es sorprendente notar que el bajo que toca Wood se ve viejo, al igual que los teclados de Medesky, instrumentos viejos pero con sonidos nuevos, llenos de energía, de una juventud jazzística sorprendente.
Más de una hora y media de música extraordinaria, sin pausas, un deleite a todo dar. MMW es un grupo que no es posible cansarse de escuchar, maravilloso espectáculo!!!