La KUT : inesperado disfrute

Asistir a las sesiones de jazz en vivo en Thelonious francamente constituye  un completo y delicioso placer que me gusta compartir. En esta ocasión fui por una banda que no había tenido ocasión de ver en vivo. Se trata de La KUT, una banda formada por 6 músicos  que practican el free jazz con notable maestría, siendo además compositores de sus temas.

Sebastián Carrasco y Benjamín Vergara en trompetas, el saxo a cargo de Edén Carrasco, la batería en manos de Matías Mar, una prodigiosa guitarra a cargo de Marcelo Troncoso y el bajo por Ulra Díaz. Virtuosos músicos que muestran una gran conexión entre sí para interpretar intensos temas, con una especial armonía en el trabajo de las dos trompetas, una combinación poco habitual en las bandas chilenas.

Deliciosos temas de impro-jazz y bastante de rock, lo cual llenó de sonidos a Thelonious. La Konfusión Unitaria Transformista (KUT), gran aporte al circuito de jazz!!. Dejé algunas fotos para el recuerdo.

Payasos de la esperanza y un final de jazz : buen final

Una obra del año 1977 definitivamente no puede ser de gusto actual, pero es una muestra de lo que fue nuestro país. Esta tarde fuimos a buscar un retazo del pasado en esta obra de teatro y nos quedó un retrogusto complicado.

En tiempos de la dictadura y en particular en esos años duros, esta obra de teatro debió ser formidable, sin embargo, es dificil trasladar ese contexto a estos días, pareció extraña, a veces un poco vacía, imagino que sin las vivencias de ese periodo de Chile, nadie podría entender mucho. Triste, estos payasos hablan de la desesperanza aprendida, del dolor cotidiano de quienes han sido castigados sistemáticamente, de quienes pueden pelear por un pucho para matar el hambre mientras elucubran acerca de como ganarse la vida.

Tras esta vivencia menos afortunada de lo que pensaba, me fui a gozar de una buena sesión de jazz. El maestrísimo Martin Joseph con su quinteto virtuoso daría lecciones de jazz en el Thelonious y no dudé un instante en asistir. Además del maestro Joseph, tres grandes del circuito jazzístico estaban presentes, por cierto sin desmerecer a los demás. Sebastián Jordán en trompeta, Agustín Moya en saxo y Daniel Rodriguez en batería, para una sesión destacada de buena música.

Una aventura musical que divirtió mis sentidos deliciosamente como espero haya sido para todos quienes repletaban Thelonious esta noche. Composiciones originales de Martin Joseph interpretadas por esos talentosos músicos que conforman los pilares formidables del jazz en Santiasco. Notables!!!

Si de música debe vestrise el final de todo, bienvenida es el final.

Cassandra Wilson : filete superior

La primera visita a Chile de esta notable cantante de jazz era el imperdible de la semana. Ganadora reciente de un grammy, sorprendió a todos con su encanto, su extraordinaria voz y su magnífica banda de músicos.

Un Teatro oriente muy lleno, saltó a la mágica propuesta musical con un inicio portentoso. Con una entrada del mejor free jazz, se desató un ritual afro sorprendente, preludio del fantástico show que tuve el privilegio de disfrutar.

La banda formada por el africano Lekan Balalola en prodigiosas percusiones y coros, el delicioso piano de Jonathan Batiste, el virtuosismo de las guitarras en manos de Marvin Sewell, el bajo y contrabajo de Reginald Veal y el carismático, talentoso, alegre y genial baterista Herlin Riley, robaron aplausos cerrados de todos por la fascinante seguidilla de temas del nuevo disco de la Flor Negra del Jazz.

Cassandra no solo canta hermosamente sino que actúa como si su música fuera un trance, literalmente se sacó los zapatos desde el comienzo y danzó por el escenario y hasta se tomó la molestia de retar a un impertinente fotógrafo que desoyó la prohibición de fotografiar el show.

Un espectáculo notable, de lo mejor que ha mostrado el Teatro Oriente. Un verdadero filetazo!!!

Ornette Coleman : free jazz

Un exponente del jazz tan relevante como Coleman, no podía dejar de considerar como cita musical en vivo. A sus 78 años, Ornette Coleman es definitivamente prodigioso, toca el saxo, la trompeta y el violin de una manera increible, en su propio estilo y de tal forma que pareciera que el instrumento emite los sonidos sin esfuerzo por parte del intérprete. Juraría que Coleman ni siquiera toma aire para sacar esa música sorprendente del saxo.

El concierto en el Teatro Caupolicán parte con algo de retraso debido fundamentalmente a los problemas con las entradas compradas por internet. Una falla produjo el caos y una discusión que todavía me resuena en mi mente. En fin, el mal rato se compensó con creces con el notable prodigio musical al cual asistimos.

Un recital breve pero contundente, un paseo por el virtuosismo y el arte del free jazz. Un escenario extremadamente sencillo, con una iluminación estática, nada que perturbara el centro de atención. Acompañado de un baterista genial, una guitarra de campeonato y un contrabajo impresionante. La sintonía entre los músicos no se alteró ni siquiera cuando agradecían los aplausos y se retiraban del escenario para un pequeño corte, al cual siguió, para pesar de todos, un único tema final.

Coleman, asombró a todos viajando a los límites de la combinatoria musical, a los bordes de la armonía y encendiendo a un público adicto. Grande!!!!