Un grupo excepcional que conozco desde los tiempos de universidad, se aparece por Santiasco después de más de 10 años. La verdad es que tras saber de su desaparición formal, solo quedaba aventurar ilusiones de cual sería la formación con la que llegaría, tras su disolución.
En un teatro Caupolicán a medio llenar (claramente por los exorbitantes precios de las entradas), cuando aparece el mítico Erik Visser, por un momento ilusioné que le seguirían el resto de la banda, pero contra todo pronóstico, solo le siguieron profesionales músicos, pero ningún original. Durante todo el concierto juré que estaba la hermana de Erik en el escenario, aunque muy torpe de mi parte, pues ella hace vientos y esa atlética rubia que creí su hermana era una formidable violinista.
Flairck se convirtió en Erick y virtuosos acompañantes, lo cual no obsta a que el espectáculo fue grandioso. Flairck es mi adorado grupo de música de cámara especial, son excepcionales y tengan respeto, son 40 años de gran música y desde mediados de los 90 que no venían a maravillarnos.
Tras el bis, apareció en escena un ejército de músicos con flautas y zampoñas para dar la nota innovadora y formidable que se espera de tanto talento reunido en un escenario. Bien por el grupo Tribu.
Flairck, después de todo, valió cada peso pagado por verles, son increibles!!!
Con humor y talento por doquier, Flairck hizo un espectáculo grandioso, un disfrute completo