Concierto de piano : una diva temperamental

He comentado muchas veces cuanto disfruto los conciertos de mediodía en el Teatro Municipal, pero siempre soy sorprendido y esta ocasión no fue una excepción.

Una buenamoza solista María Teresa Sepúlveda, elegantemente vestida y un negro piano de cola era toda la puesta en escena. Por primera vez este año, no habían estudiantes en los palcos, lo que añadió un gran silencio al teatro.

Candidata a Doctora en Artes Musicales en una universidad de Nueva York, la pianista tiene un nutrido curriculum y eso esperábamos disfrutar.

Partió con una pieza de Beethoven, seguida de una de Brahms. Mientras tocaba esas variaciones de Brahms, un desubicado se puso a conversar y ella se detuvo instantáneamente ante la sorpresa de todos. Espero el silencio total unos segundos mirando fijamente al «delincuente» y prosiguió. Ufff, vaya temperamento.

Después salió una tercera y cuarta vez para tocar a Schumann y unas piezas deliciosas de Chopin. Cuarenta minutos de extraordinaria interpretación del piano.

Espero que el próximo año, traiga más delicias del arte al mediodía en el Teatro Municipal

Cerati en Chile: gran show

A pesar que en el nuevo disco a primera vista no encontraba las claves poéticas notables de Cerati, pensé que no debía perderme un espectáculo en vivo y no me equivoqué.

El concierto originalmente previsto para un día sábado terminó, amigdalitis mediante, realizándose el lunes siguiente. Imagino que hubo quienes no pudieron asistir, ya que había cierta pequeña holgura en los espacios.

Muy divo, se hizo esperar media hora antes de salir al escenario. Muy propio de su buen gusto diseñador, la puesta en escena impecable, riguroso negro en modelitos de colección incluyendo la mini de la chica que hacía coros y que tenía una pinta yonki impresionante.

Todos los temas del disco Fuerza Natural salieron con la habilidad de un maestro como Cerati, aunque a muchos les quedó la sensación que el sonidista no hizo bien su pega. Entre los temas, Cerati fue dejando muy claro que estaba enfermo y que el milagro se debía a los antibióticos y que por cierto regresaría a la cama (solo) apenas terminara el concierto.

Tras una pausa, vuelve a salir y poco a poco el resto de la banda, ahora todos en color blanco, marcando claramente la segunda parte del show, basada en temas de discos anteriores y que todos corearon incansablemente. Asimismo, se mostró el esplendor de una escenografía que hasta ese momento estaba insinuada solamente. Para mí y probablemente para unos cuantos, esta segunda parte del recital fue lo mejor.

Finalizando el show, Cerati animó a la gente para que lo respaldara en no hacer una «farsa de bis» y que tocaría los temas que tenía preparados para el bis de inmediato. Fue un acto que sospecho se originó en que estaba sintiéndose muy enfermo. Igual, eres grande Cerati!!!

La Bota : comida italiana en todo horario

Hace ya unos seis meses que se amplió el Patio Bellavista y eso dió a luz una serie de nuevas opciones disfrutables para comer y beber. Hoy decidi visitar casi a las 18 horas un lugar para almorzar, ya que estuve visitando a mi padre hospitalizado.

Para mi grata sorpresa, el lugar atendía y sin ninguna dificultad en este horario y con una rica oferta de platos. Para partir, pido unas tostadas con una triada de salsas, paté toscano, tomate rúcula y un pesto de aceitunas. Mortalmente exquisito y perfecto para calmar a mis tripas hambrientas y prepararme con menos ansiedad a disfrutar mi plato principal.

La carta con pocas pero contundentes y seductoras opciones. Pedí sin dudar unos Raviolones Orietta con salsa de aceituna negra con cebolla acaramelada y espárragos. En la carta de vinos, pude encontrar un buen merlot de La Joya. Una exquisitez de almuerzo.

Cuando supe que para los postres y fuera de carta existía la posibilidad de probar helados en combinaciones exóticas, pedí un literalmente un muestrario en que incluí, naranja – jenjibre, frutilla – menta, limón – albahaca, plátano – yogurth y miel, harina tostada (notable helado) y uno llamado málaga. Fantásticos!!!!

La Bota, excelente lugar!!

Hermeto Pascoal : un privilegio genial

Apenas supe que venía a Santiasco, compré las entradas y eso que estaba seguro que no son muchos quienes conocen a este genial músico brasileño. Me dio miedo perder la oportunidad.

En mis permanentes búsquedas de jazz, descubrí años atrás a este increíble personaje, capaz de hacer música con cualquier cosa, a improvisar permanente y virtuosamente. Multiinstrumentista y probablemente padre de muchas generaciones de músicos de Brasil y del mundo, admirado por grandes como Miles Davis o Piazzola. En definitiva, un concierto imperdible.

Como era de esperar, muchos músicos del circuito del jazz estaban presentes en un teatro NOescafé bastante lleno. Lo notable es que el público era de todas las edades y con un entusiasmo que desbordó en todas las ocasiones en que fuimos parte de la música que el maestro Pascoal nos involucraba.

Todos los músicos que acompañaban a Hermeto, maestrísimos y claramente devotos del maestro. Partieron con un precioso solo de voces y luego en la ejecución prodigiosa de los instrumentos. teclados, batería, percusiones, bajo y saxos. Además, cumpliendo cada deseo de Hermeto, acompañaban cada locura de improvisación que se le ocurría.

Es difícil expresar el disfrute de este show, por lo que les dejo una secuencia de fotos con lo más destacado.

Milton Nascimento : sabrosa y buena música

Un cantautor de este calibre bien se merece una crónica. Me gusta esa mezcla de balada, jazz, fusión y pop que logra prodigiosamente este músico, quien vino a Chile a celebrar 50 años de vida artística.

Aunque no podía corear sus canciones como muchos lo hacían, disfruté que tanta gente y de tan variadas edades se supiera las letras. En realidad es un fenómeno este artista y a pesar que se casi no se mueve y camina cansadamente (67 años), el teatro estaba lleno de energía y movimiento.

La textura de su música es tan compleja que puede juntar varios estilos en una misma canción y hacerlo perfecto. A veces solo es música, otra veces textos e incluso sonidos casi guturales y todo es sensacional.

Les regalo algunas tomas que hice durante el concierto.

Café del Museo : buen inicio del tour

Para comenzar en buenas condiciones un tour de museos, nada mejor que un desayuno potente en un lugar bonito.

Tras una tranquila caminata por el parque, llegué a la Plaza del Mulato Gil en el barrio Lastarria y encontré abierto el nuevo Café del Museo. Un exquisito lugar en la apacible plaza, con su terraza dispuesta a recibir paseantes como yo.

Una pequeña carta con desayunos, sandwiches, ensaladas, dulces y jugos naturales. Una rápida selección terminó con un enorme vaso de jugo de naranjas y zanahorias para acompañar un rico y abundante prensado, queso y jamón en un pan ciabatta blanco, deliciosamente caliente y servido en un lindo plato adornado con brotes verdes. Así desayuné deliciosamente, mirando el trozo del muro de Berlín que se encuentra en la Plaza con motivo de los 20 años del fin del muro.

Con ese acto de partida, pude visitar el MAVI del cual destaco la colección de esculturas del museo que incluye una hermosa obra de Matta y varias otras de gran valor visual y artístico.

Me dirigí al Museo de Bellas Artes (MNBA) para ver la muestra Deshacer el Espacio de Gordon Matta-Clark, un activista del arte conceptual o como reza su legado, la anarquitectura. Desconocido para mí, fue una sorpresa ver videos y fotografías de las increíbles proezas de intervención en edificios destinados a ser demolidos y que horadaba y destruía artísticamente. Qué enorme esfuerzo!!

En el segundo piso una linda muestra de Malú Stewart llamada Jardín de Agua, provocador juego de reinterpretación de una obra de Monet.

Después me fui al MAC, en cuyo zócalo estaba la muestra Rare Paintings del español José Manuel Ciria, pinturas abstractas llenas de color y fuerza. En las otras salas se puede observar una inquietante muestra llamada Lo Impuro y lo Contaminado, con obras que exacerban contrastes de la sociedad, violencia cotidiana, figuras de la religión, expresiones de la vulgaridad y la política.

Buen paseo matinal!!

Minga Bar : exquisita terraza

Tras una intensa sesión de trabajo con mis partners de proyectos especiales, el hambre y la sed nos subyugó y salimos a buscar un nuevo sitio en una calurosa noche de Santiasco.

En una callecita olvidada del barrio Manuel Montt, encontramos un sitio que debe tener unos tres meses de antiguedad. Una casona de corte colonial con una terraza en la entrada, un comedor y bar en el primer piso y un segundo piso con algunas mesas, pero lo más interesante era la terraza del segundo piso. Mejor perspectiva del paisaje nocturno y al aire libre para aprovechar la noche de primavera.

Cada uno de nosotros eligió una pizza a la piedra, una de Maiz (Mozzarella, choclo y albahaca), una cuatro estaciones (Mozzarella, champignon, choclo, pepperoni y jamón) y una Meditarránea (Mozzarella, queso de cabra, pimentón y rúcula). Exquisitas!!!!

Para acompañar, cada cual pidió su trago favorito y nos dimos al oficio de comer más pizza de la que se puede comer (cada pizza está destinada para tres personas por lo menos). Golozos y entretenidos discutiendo sobre nuestros proyectos, logramos terminar con todo, añadiendo pimienta y merkén, dos estimulantes condimentos.

El lugar se especializa en pizzas y bar, lo que lo transforma en una buena opción para compartir una buena conversación con amigos. Buen lugar!!!.

Bar Panchito : un acierto mexicano

Cenar algo rico y en un sitio nuevo es una tentación que pocas veces resisto y esa noche quería cocina mexicana, por lo que mis pasos fueron directo al barrio Condell en donde hace pocos meses vi nacer este bar restorán.

Si bien se presenta como bar, en realidad es un buen lugar para comer. Una casa de dos pisos que antes ocupó la interesante cocina de autor del restorán Suquet (duró muy poco, no?), fue delicadamente ambientada para dar vida a este nuevo lugar.

En la entrada un bonito juego de aguas, en las paredes murales, dibujos en papel de envolver y muchos soles de greda y madera. Rápida atención y ya tenía mi aperitivo, un Sunrise (tequila, naranja y granadina) acompañando un pote de guacamole y nachos. Sobre la mesa, papel de envolver y un conjunto de lápices de cera, para rayar a gusto.

La carta con muchas variedades de tequila, cocktails, sangrías y cervezas. Entradas desde guacamole, pasando por ceviche, ensaladas, tacos, platos fuertes, enchiladas, fajitas y un gran etcétera. Nada de Tex-mex, comida mexicana de verdad.

La cocina al fondo tras una vidriada vitrina, la música llena de baladas y artistas mexicanos y otros no tanto (Beto Cuevas). Pedí unos tacos del pastor (carne marinada con mucho picante y piña) y unos tacos bistequeso (carne asada con queso y pimiento). Potentes platos que merecían un rico vino y la carta de vinos traía una sorpresa, un syrah Tuniche 2007 del valle de Cachapoal, exquisito!!!.

Cené al calor del ají y la música hasta la hora del postre, un pastel de elote (maiz) con coulis de fresa, delicioso. Fue necesario un buen café negro para cerrar esta potente cena.

Qué rica es la comida mexicana!!!

Café del Ópera : delicias en el barrio Bellas Artes

Las ganas de refrescarnos con un rico helado, nos llevó a visitar este nuevo lugar y fuimos sorprendidos gratamente.

Al lado de los restoranes Ópera y Catedral, este reciente lugar es una belleza del diseño y la arquitectura. Gran trabajo!!!.

Lo primero que se ve del lugar es la vitrina de helados, que tiene una oferta deliciosa y viene claramente a competir con el Emporio La Rosa, al final de la misma cuadra. Las lámparas con pantallas de cobre dan un toque genial al lugar, además de la madera y el mobiliario finamente moderno.

Elegimos helado de maracuyá (Fruto del paraíso) acompañado con helado de casis y para mí el mismo helado de maracuyá pero con un helado de chocolate amargo, combinación extraordinaria!!.

En el segundo piso existe un ambiente tipo lounge al que se accede por una escalera al final del primer piso. Abajo las mesas propias del café y en donde no pude evitar servirme un rico café panna.

Rico lugar, al nivel de sus restoranes hermanos.

Auditoría de Ciclovías 4.0 : curioso recorrido

Recorrer las calles de Santiasco en cleta, usando las ciclovías como referencia, es una gran oportunidad para conocer nuevos lugares, registrar algunas bellezas y porque no decirlo, ser espectador del comportamiento humano.

La odisea comenzó en la plaza Italia, lugar en que tomamos la ciclovía que va por el Parque Bustamante y que llega hasta Jofré. Salvo por esos habituales peatones que usan la ciclovía, fue un tramo tranquilo. Una cuadra mas allá, en calle Marín pudimos retomar en otro segmento de ciclovía, para ir saltando de un trozo a otro sin ninguna señalización. En calle Salvador desaparece y hay que intuir que en alguna parte continúa. De hecho reaparece en Pedro León Gallo y se puede llegar a José Miguel Infante, en donde de nuevo hay que ejercitar el instinto.

Por fin llegamos a la ciclovía de Antonio Varas, en donde pudimos avanzar por una muy buena pista hasta Diagonal Oriente, en donde cambia drásticamente de calidad (baja a la calle separada de los autos solo por topes de goma) y continuamos hasta la esquina de Simón Bolívar, en donde tomaremos hacia el oriente. Esta ciclovía es una verdadera carrera de obstáculos, al punto que tiene más curvas e irregularidades que ninguna otra pista cletera que conozca.

Durante el trayecto, pude notar que claramente se armó la ciclovía haciéndole el quite a árboles, estacionamientos, postes y cuanta cosa existía antes. Es evidente que lo que se quería era mostrar que se había hecho una ciclovía, pero nadie pensó en los ciclistas y tampoco en la gente que para ingresar a sus casas debe invadir la ciclovía (al menos mientras abre la puerta). Tuve una interesante charla con una señora que se molestó mucho porque fotografié la camioneta de un familiar que estaba estacionada sobre la ciclovía mientrás cargaba unos objetos que sacaba de la casa. Concordamos que el problema no son los ciclistas como ella alegaba sino la mala calidad del diseño de la ciclovía.

En la esquina Elecier Parada, hay que tener la sangre fría para pasar y no ser atropellado. De verdad que es demasiado peligroso el cruce y hasta es mejor bajarse de la cleta.

En Montenegro, pudimos enlazar con otra ciclovía que nos llevó por un apacible barrio residencial hasta el cruce con Emilia Tellez en donde encontramos la cicloruta más freak de esta auditoría. No alcanzamos a avanzar dos cuadras por ella, cuando nos encontramos que la ciclovía era el estacionamiento interminable de camiones y autos. Aparentemente los camiones corresponden a los locatarios de una feria y los autos a los residentes del sector, porque según averigué siempre se habían estacionado ahí. Deplorable el truco del municipio de Ñuñoa de anotarse ciclovías sin ningún diseño ni control.

Tomamos la ciclovía en sentido inverso y pudimos llegar a Tobalaba, en donde conectamos con la ciclovía «natural» en los senderos del parque. Por esa vía, pudimos llegar a la excelente ciclovía de Pocuro (la mejor para mi gusto) y volver por ella hacia Antonio Varas.

El registro fotográfico de la auditoría lo pueden ver aquí.

Hasta la próxima auditoría!!!