No venía al Geométrico desde inicios del 2010, pero esta noche casi no había sitios atendiendo. Por lo que al verlo abierto, me instalé raudo en la pequeña terraza de la calle e hice mi pedido. Seleccioné un Ron para beber y me tenté con unas empanaditas de queso de cabra, tomate y albahaca con merken, deliciosas!!.
Solo tenía unos minutos disponibles, por lo que fue extraordinaria la sintonía, yo quería comer rápido y ellos querían cerrar pronto. La magia de la noche en acción.
Un lugar preciso como la geometría!!