Cada vez que había intentado comer en este lugar del Cerro Bellavista, ocurría algún percance que lo evitaba. Esta vez, lo conseguí.
Llegamos bastante tarde a esta increiblemente hermosa casona para probar un almuerzo sentados en la enorme terraza con una de las mejores vistas al puerto de Valparaíso (solo le compiten el café Atkinson y el restorán C). Unos pocos comensales y una floja, muy floja atención, pero poco a poco fue tomando algo de ritmo. Aunque fuimos los últimos clientes de ese día a quienes el notable chef cocinó, pasó la prueba del sabor.
Este restorán cuya especialidad podría denominarse eclecticismo étnico, posee comida italiana, tailandesa, española, japonesa, indonésica, india, marroquí y más, además llama la atención por su fantástica arquitectura y bellísima vista, no en vano es uno de los lugares preferidos de los turistas extranjeros.
Para partir el chardonay sour maridó muy bien con un ceviche. Para los fondos, un rico filete de mero con curry verde y un filete de corvina con curry rojo (muy picante!!). Acompañamos con una buena botella de Syrah que le viene muy bien a estos platos.
Finalmente algo exquisito, kuffi (postre típico de la India) que permitió un rico cierre para esta incursión.