Aunque de partir por mencionar que me encanta la versión de este restorán en Viña del Mar, el local en Santiasco es un disfrutable oasis en la bullente Providencia.
Había invitado a una gran amiga que por estos días recibió la chocante noticia del descubrimiento de cáncer en su padre. Esta era una ocasión propicia para transmitirle energía positiva y conversar con un plato de comida enfrente es especialmente beneficioso.
Partimos con unos bien preparador kir royale mientras avanzaba nuestra conversación. Añadimos para compartir unas machas parmesanas que nos dio un delicioso comienzo del evento. Destaco la temperatura del lugar, ideal para días calurosos. Se agradece.
Para los fondos, mi amiga eligió un plato especial de la casa, un congrio Cap Ducal, esto es, un congrio a la plancha con una salsa con base de erizos y vino blanco en donde se mezclaba un extraordinario surtido de mariscos. En mi caso, pedí un congrio con salsa de alcaparras, también filete a la plancha con alcaparras y tomillo mezclados en crema natural. Francamente delicioso!!
El vino que no podía faltar, un pinot noir de Caliterra, que a pesar que hubo que enfriarlo apresuradamente en una cubeta con mucho hielo y agua, le vino increíble a los platos.
Con tanta conversación y disfrute se nos pasó la hora y tuvimos que cerrar con una tazas de café negro y salir corriendo al mundo real.